Las enfermedades de salud mental son complejas, y aún más en el grupo etario de Personas Mayores. Según el Observatorio de Envejecimiento de PUC, en Chile “sólo un 2% del presupuesto total de salud se invierte en esta área -prevención y tratamiento- a pesar de que la ONU recomienda una inversión del 5%”. Es preocupante que la salud mental en la vejez no sea atendida en su complejidad.
Los factores que resultan perjudiciales para la salud mental en adultos mayores son los los sentimientos de soledad, la inactividad y la dependencia. En contexto de pandemia, la pérdida de una rutina diaria tuvo efectos perjudiciales en el estado físico, pero también en la salud mental.
Según las cifras de la Organización Mundial de Salud; “más de un 20% de las personas que pasan de los 60 años de edad sufren algún trastorno mental o neural y el 6,6% de la discapacidad en ese grupo etario se atribuye a trastornos mentales y del sistema nervioso”. Estos trastornos representan en la población anciana un 17,4% de los años vividos con discapacidad. La demencia y la depresión son los trastornos neuropsiquiátricos más comunes en ese grupo de edad.
Los factores de riesgo de los trastornos mentales son más frecuentes los ancianos son más frecuentes experiencias como el dolor por la muerte de un ser querido, un descenso del nivel socioeconómico como consecuencia de la jubilación, o la discapacidad. Todos estos factores pueden ocasionarles aislamiento, pérdida de la independencia, soledad y angustia.